Manuel Belgrano, el general / llegó
con tropas va al Paraguay / le ha dao Rosario los milicianos
/ son rosarinos, buenos paisanos / y
Santa Fe le ha de sumar los cien blandengues pa’ l general.
Francisco Aldao, el capitán / le está
contando a Don Manuel / que hay un sargento mejor que él
/ quién sino López habría de ser / ese
sargento dónde andará / a ese sargento tráiganlo acá.
Junto a Belgrano el combatió/en
Campichuelo y Paraguai/Cayendo preso en Tacuarí/lo
trasladaron para Asunción/y lo
embarcaron en Doña Flora/una fragata bien española.
En la fragata encadenado/del
cautiverio está cansado/Montevideo se ve a lo lejos/el río del Plata da su
reflejo/cuatro mil metros hay que nadar/para a la costa poder llegar.
Surge una alerta desde estribor/está
extrañando su Santa Fe/y aprovechando que no se ve/se tira al agua desde
babor/el Quillá lo hizo buen nadador/chiflan las balas alrededor.
Llegó a la costa y allí Rondó/le dio
un abrazo y felicitó/por ser valiente y decidido/este sargento
es ascendido/ya llega alférez a Santa
Fe/con sus blandengues se vuelve a ver.